jueves, 27 de mayo de 2010

Absoluta pérdida de la dignidad

En estos momentos estoy como Movistar después de haber emitido ese anuncio espantorroso en la tele: con la dignidad personal por los suelos.

Ayer tuve el examen de LA asignatura, asignatura que no me gusta, que detesto, que odio, que no me interesa y que encima el examen oral. Y cuando Moody tiene que hablar en público, aunque sólo sea ante su profesora, literalmente SE MUE-RE como todo aquél que ose decir algo de Andreíta, porque, por si todavía nadie se ha enterado, Belén Esteban, por su hija MA-TA (oh novedad...).

Total, querido lector (si esque existes y estás ahí), que la profesora, por alguna extraña razón, me quiere, me adora, me ha puesto un piso en plena Gran Vía (bueno, eso no) y me trata con mucho cariño (según mi amiga L., las pescoletas del coño le hacen palmas cuando me ve -sic.-) y además se piensa que soy retrasado mental, pero no en plan mal, sino en plan "pobrecito que la inteligencia no le da para más, es tontito el pobre".

Así que, ante la situación de completo desconocimiento de la asignatura (porque en todo el curso no he llegado a saber ni siquiera de que cojones trata la puta asignatura, bueno, sí, sobre el sistema financiero, pero sigo sabiendo lo mismo de su funcionamiento que cuando tenía 4 años), la alta probabilidad de irme al pozo (aka. suspender) y las pocas ganas que tengo de estudiar (si alguien las ve, que por favor me avise), decidí dedicarle el tiempo justo y necesario que se requiere para aprobar una asignatura anual de estas características: 2 días y medio.

En fin, que entro en el examen (como un flan) y hablando un poco entrecortadamente (como si se me hubiese derretido el cerebro). Y coge la muy guarra y se empiea a reír, rollo "¡uy, Moody! Lo que me vas a hacer reír...". Así que decidí montarme el teatro del siglo y parecer que estaba más nervioso de lo que en realidad estaba y sobre todo mucho más tonto de lo que se piensa que soy.

Ejemplo práctico: "¡Ay! ¡Sí, sí!.... Espera... Bueno, te lo voy a contar con mis palabras que sino me hago un lío...

Ejemplo práctico 2: Fecha de la última OPV. Busca en el periódico y dímela. Mmmm..... estoooo....(miro en el periódico y pone:22-03-2010). Veintidoooooós del cerotreees digoooo (y contando con los dedos en voz alta) enerofebreromaaaaaaaaaarzo dedosmiiiiildieeez.

Y unas cuantas preguntitas más, la última cagada absoluta y me dice "ya te puedes ir". Y acto seguido "pero bueno, tú tranquilo, ¿eh? no te preocupes por nada Moody, POR NADA".

Lo dicho, muy poco digno: el aprobado con menos dignidad de la historia.

Moody.

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